Puede cambiar la vida
sus ramas, como un árbol
cambia las suyas desde
el verde hasta el otoño.
Puede, pilar oscuro,
suplicio oscuro puede
recubrirse de frutos
como un mes de verano.
Ah puede también caer,
caer no sé hasta dónde,
como cae el poema,
o el amor en la noche,
hasta no sé qué fondo
duro y ciego y terrible,
tocando el agua madre
el manantial del miedo
La poeta uruguaya de 92 años Ida Vitale acaba de ganar el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca. Este es el pequeño homenaje de Mi casa.
Una belleza.
Muchas gracias por invitarla a tu casa.
Besinos mil.
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Una belleza, sí. Mil besos, José
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OTOÑO
Acá los días se achican insensiblemente, la luz se tumba, algunas hojas ocre inician el desplome del verano. Ya no ofende el paño sobre el cuerpo y se agradece la tibieza del sol en una bocacalle. La mirada cambia en los transeúntes, los ojos se agrandan y los amigos te acarician la bocamanga….
Ahora, en cosa de minutos, parto a otra conferencia, que me invitan hombres que se preocupan por los jardines, por los arriates y por los toboganes de los niños: parques públicos.
Un beso, Sol.
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Qué alegría encontrarte de nuevo en tu casa, Fred. Te echaba de menos deambulando por sus estancias. Siempre es un gusto leerte. Un abrazo grande
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Estaciones…insistentes y cíclicas como la vida. Austral primavera que no perdona las ramas desnudas y asombra con pájaros y nidos airosas copas de flores azules.
Una fuente refleja en su voz de agua el cielo intenso.
Y un bello poema.
Besos, Sol.
Celia
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Querida mía, qué bien escribes y qué alegría siento siempre al encontrarte. Te envío muchos besos, y disfruta de tu primavera
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Sol querida: Siempre recorro tu adorable Casa y te leo. Si no escribo seguido es porque recientemente se han agregado situaciones familiares graves que debo resolver sólo yo y casi no respiro tiempo.
Pero estaré.
Muchos besos
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