Nunca había visto ninguna ópera proyectada en un cine hasta hace unos días. Me resistía, convencida de que al perder el calor del directo se desvirtuaba la representación. Desde el sofá de casa puedes escuchar las mejores grabaciones, los mejores directores y las mejores orquestas de las composiciones que elijas, pero nada resulta comparable al directo. Sin embargo me decidí a ver en el cine Palafox La forza del destino, de Verdi, fundamentalmente porque no creo que tenga ninguna oportunidad de escuchar al tenor Jonas Kaufmann en directo y tenía mucho interés. Y lo cierto es que he disfrutado enormemente. La representación tuvo lugar en la Bayerische Staatsoper de Munich en julio de 2014, con la Bayerisches Staatsorchester conducida por Asher Fisch y con Jonas Kaufmann como Don Álvaro, Anja Harteros como Leonora, Ludovic Tézier como Carlo di Vargas y la mezzo soprano Nadia Krasteva como Preciosilla.
Me sorprendió la extraordinaria calidad del sonido teniendo en cuenta que estábamos en una sala de cine. La exquisita realización permitía disfrutar de la capacidad actoral de los protagonistas, especialmente de Jonas Kaufmann, del que me he enamorado para el resto de mi vida. Para escuchar algo parecido habría que remontarse al mejor Pavarotti, al mejor Plácido Domingo, según mi escaso entender. Una voz extraordinaria, hermosa, potente, llena de matices, de gran expresividad. Su presencia llena el escenario. También me gustó mucho Anja Harteros, que borda su papel con una voz bellísima. Me gustó menos la escenografía, pero resulta anecdótico frente a la excelencia de las interpretaciones.
Os dejo con ella: